La importancia de la imagen y la comunicación hoy en día

El protocolo y el ceremonial usados como herramientas de trabajo, son el referente de una gestión bien hecha.

 

Hoy, nos encontramos en una era completamente distinta de la que conocimos, el gran cambio lo está marcando la transición de una sociedad industrial al paradigma de una sociedad del conocimiento.

El número de universitarios ha aumentado de manera considerable en estos últimos cincuenta años. Ya no es suficiente certificar que estudiaste en la Universidad, ésa es una característica que poseen muchos jóvenes. La sociedad se ha dado cuenta de que no bastan los conocimientos almacenados y aprendidos durante toda una carrera si estos no se saben emplear y presentar ante el resto de la sociedad, es necesario disponer de recursos que en cierta forma sirvan para dar a conocer la propia capacidad del individuo y su facilidad para asumir y resolver los problemas. La empresa necesita de un recurso humano capaz de transmitir credibilidad a ese mercado al que está orientado su fin último, el producto que ésta genera.

Por ello, se hace necesario encontrar la forma de diferenciarse y establecer un determinado posicionamiento. El primer paso es encontrar o más bien trabajar esas cualidades que nos hacen atractivos y diferentes como profesionales al buscar empleo. Existen ciertos elementos invisibles que hasta hace más bien poco no se tenían en cuenta y que en cierta manera han venido a representar un cierto valor añadido a este siglo XXI.

“El conocimiento es el único recurso ilimitado y el único activo que aumenta con su uso”. Paul Michael Romer

La gestión de este valor que llamaremos «capital inmaterial» incorporado a la marca individual formará parte de la capacidad humana y tendrá un fuerte peso en los procesos de comunicación tanto empresarial como laboral o simplemente social; es decir, aquel individuo que además de poseer unos conocimientos sólidos, posea también las formas de ser y estar, tendrá ventaja sobre el que tan sólo tenga conocimientos.

El protocolo y el ceremonial se puede decir que son instrumentos tanto corporativos como individuales para difundir de alguna manera mensajes de un modo no verbal.

Es por tanto que el activo inmaterial o capital intangible del individuo del que hablábamos en un principio está basado tanto en las circunstancias por las que transcurre su vida socio-profesional como en la comunicación que pueda generar este propio estado de vida social generando todo tipo de mensajes no verbales al resto de individuos que circunscriben su espacio vital.

Llegados a este punto debiéramos de considerar que nuestros universitarios, aun saliendo bien formados de nuestras universidades, siguen siendo incapaces de ofrecer una imagen acorde con la gran formación que puedan poseer, en cuanto a la comunicación y a pesar de que vivimos en una sociedad cada día más mediatizada les resulta difícil hacerse escuchar y entender, todo ello porque desde hace ya mucho tiempo el sistema educativo no contempla el conocimiento de las herramientas que ayudan a tener una comunicación fluida y entendible.

Es por tanto que no basta con hacerlo bien, es necesario hacerlo saber, y más cuando hablamos de aquellos conocimientos que muchas veces son intangibles y cuantificables, tan sólo dándolos a conocer por medio de nuestras habilidades pondremos en valor nuestras capacidades. La característica de una persona, ya sea innata o adquirida, si está bien gestionada y puesta en valor, será casi seguro la clave del éxito en cualquier puesto de trabajo.